El 17 de abril de 1895 (23 de marzo del año 21º del reinado del emperador Guangxu), la corte Qing firmó el desigual Tratado de Shimonoseki con Japón bajo el Gobierno Meiji en Shimonoseki de Japón. El artículo 2 del Tratado estipula:
Artículo 2: China cedió a perpetuidad a Japón la plena soberanía de los siguientes territorios, junto con todas las fortificaciones, arsenales y los bienes públicos en ellos:
En noviembre de 1943, los gobernantes de China, EE.UU. y Gran Bretaña se reunieron en El Cairo. En diciembre de 1943, los tres países emitieron conjuntamente la Declaración de El Cairo, manifestando en público el propósito de luchar conjuntamente contra Japón y estableciendo en términos explícitos que Japón debe devolver incondicionalmente todos los territorios que había invadido y ocupado ilegalmente.
En julio de 1945, China, EE. UU. y Gran Bretaña publicaron la Proclamación de Potsdam entre China, EE.UU. y Gran Bretaña Exigiendo la Rendición de Japón, denominada en breve la Proclamación de Potsdam, poniendo de manifiesto su decisión de luchar juntos para derrotar a Japón. De acuerdo con el artículo 8, “Los términos de la Declaración de El Cairo serán llevados a cabo y Japón deberá devolver todos los territorios que invadió y ocupó ilegalmente”. El artículo, en términos explícitos, estipuló también el territorio legal de Japón. La Unión Soviética se adhirió a la Proclamación de Potsdam en agosto de 1945 después de declarar la guerra a Japón.
El Instrumento de Rendición de Japón fue firmado el 2 de septiembre de 1945 y declaró que Japón se rendiría incondicionalmente ante las Potencias Aliadas. El Gobierno japonés se comprometió a cumplir fielmente las obligaciones consagradas en las disposiciones de la Proclamación de Potsdam, y devolver incondicionalmente todos los territorios robados de China, incluyendo Taiwan y las islas Penghu. El Instrumento estipula lo siguiente: